Tabla de contenido
¿Cuáles son los suelos volcánicos?
Bajo el nombre de suelos volcánicos se agrupa a aquellos suelos originados a partir de materiales piroclásticos y que contienen una alta proporción de minerales con gran afinidad por las moléculas de agua. Nombres tales como Andosoles o Andisoles hacen referencia a suelos originados a partir de material volcánico.
¿Cómo se forma el suelo volcánico?
Los suelos Ñadi se formaron a partir de cenizas volcánicas holocénicas depositadas sobre estratos fluvioglaciares en la Depresión Intermedia del sur de Chile.
¿Dónde se ubican los suelos volcánicos?
Se trata de suelos muy aptos para la agricultura si las condiciones del relieve lo permiten. Como es lógico, su ubicación se circunscribe generalmente a las regiones con volcanismo activo o no muy antiguo.
¿Cómo saber si un suelo es volcánico?
Los suelos volcánicos se caracterizan por una elevada capacidad de adsorción de fósforo (fijación), la cual consiste en el paso de los fosfatos solubles aplicados al suelo como fertilizantes a formas menos solubles, mediante un proceso de reacción con el suelo (Shoji et al., 1993).
¿Cómo se clasifican los suelos?
El suelo incluye tanto la parte geológica como las comunidades biológicas que viven en él y que contribuyen a su formación y transformación. La disciplina encargada de estudiar, evaluar, comparar y determinar la composición de los suelos es la edafología. Los suelos se clasifican en función de su composición y estructura.
¿Qué es el suelo y para qué sirve?
El suelo es el sistema fundamental que sustenta la vida en la Tierra. El suelo incluye tanto la parte geológica como las comunidades biológicas que viven en él y que contribuyen a su formación y transformación. La disciplina encargada de estudiar, evaluar, comparar y determinar la composición de los suelos es la edafología.
¿Cuáles son los diferentes tipos de suelos tropicales?
Suelos típicamente de clima tropical y subtropical. Nitisoles: suelos tropicales rojos, profundos, bien drenados con un horizonte subsuperficial arcilloso con sodio. Ricos en hierro. Ferralsoles: son los suelos clásicos de los trópicos húmedos, profundamente meteorizados y con colores rojos o amarillos.