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¿Qué pasa si hago ejercicio y me mareo?
Sentirse mareado después de un entrenamiento es algo que pasa con mucha frecuencia. A menudo, es el resultado de algo menor, como una deshidratación leve. Sin embargo, en otros casos, puede indicar una afección subyacente que requiere tratamiento.
¿Por qué me dan mareos al levantarme?
Este tipo de mareos debidos a la presión sanguínea son fáciles de explicar. Al estar tumbados y ponernos de pie, la sangre se dirige hacia las piernas y el tronco; esta acumulación hace que se reduzca la presión arterial y la cantidad de sangre que el corazón manda hacia el cerebro.
¿Qué hacer si se me baja la presion en el gym?
Te explicamos la mejor forma de actuar si te sucede:
- Pon las piernas en alto. Estírate y elévalas. Con esta posición consigues que la sangre de las extremidades inferiores llegue más fácilmente al corazón y así sube la presión arterial.
- Té, chocolate, regaliz… Son sustancias “estresantes” que elevan la tensión.
¿Por qué tengo mareos cuando hago ejercicio?
Es normal que presentes mareos mientras estas adaptándote, sobre todo, si has empezado a hacer ejercicio y si, adicionalmente, agregas una dieta de ayuno intermitente o cetogénica.
¿Qué significa sentirse mareado después de un entrenamiento?
Si el mareo solo ocurre cuando se utiliza una cinta para correr o una máquina similar, puede sugerir vértigo. Ocasionalmente, sentirse mareado después de un entrenamiento podría significar que una persona tiene presión arterial baja, en especial si está embarazada.
¿Por qué te mareas al entrenar?
Si cuando te mareas tu tensión baja, es necesario que consultes al especialista para un diagnóstico adecuado. Los mareos puntuales por tensión baja suelen combatirse con un poco de azúcar y reposo. Una vez que puedas determinar la causa que hace que te marees al entrenar, ya puedes poner en práctica algunos de nuestros consejos:
¿Cómo evitar el mareo cuando practicas actividad física?
A medida que vayas practicando actividad física, irás perdiendo esta sensación, por lo que no debes alarmarte. Te recomendamos que, si una vez que inicias el ejercicio presentas el mareo, reduzcas la intensidad de la actividad física o inclusive la detengas durante ese día y continúes al siguiente.