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¿Cuál es el síndrome de irradiación aguda?
El síndrome de irradiación aguda (SIA), también conocido como enfermedad por radiación, es una enfermedad grave que puede ocurrir cuando una persona se expone a niveles muy altos de radiación, usualmente durante un período corto de tiempo.
¿Cuáles son las fases del síndrome agudo de radiación?
El síndrome de radiación aguda evoluciona normalmente en tres fases:
- Primeros síntomas tales como náuseas, pérdida de apetito, vómitos, cansancio y, cuando se reciben dosis muy altas de radiación, diarrea (llamados en conjunto «pródromos»)
- Un periodo sin síntomas (fase latente)
¿Cómo se detiene la radiactividad?
La descontaminación se realiza mediante lavado o duchas. El lavado ha de ser enérgico para asegurar la eliminación del elemento contaminante, pero no tanto como para abrir heridas que pudieran servir al contaminante de entrada en el torrente sanguíneo.
¿Qué es el tratamiento para el síndrome de radiación aguda?
El tratamiento para el síndrome de radiación aguda consiste en un tratamiento de apoyo, que trata lesiones fatales como quemaduras, alivia los síntomas, incluido el dolor y previene la contaminación radiactiva adicional. Los pasos del tratamiento para el Síndrome de Radiación Agudo comprenden lo siguiente:
¿Cuáles son los síntomas del síndrome de irradiación aguda?
La dosis de radiación se recibió en un período corto de tiempo, normalmente en unos minutos. Los síntomas del síndrome de irradiación aguda pueden incluir nauseas, vómitos, dolor de cabeza y diarrea.
¿Cuáles son los síntomas de la radiación?
Los síntomas y la gravedad que variarán de acuerdo con la dosis de radiación que haya recibido. Estos síntomas incluyen pérdida de apetito, fatiga, náuseas, vómitos, diarrea y posiblemente hasta convulsiones y coma. Esta etapa de la enfermedad grave puede durar entre unas horas y varios meses.
¿Qué es el tratamiento para la enfermedad por radiación?
El objetivo del tratamiento para la enfermedad por radiación es administrar dolor, reducir los síntomas, tratar las lesiones que ponen en peligro la vida, como los traumatismos y las quemaduras, además de evitar una mayor contaminación radioactiva. El tratamiento también depende del tipo de radiación que sufre el individuo afectado.