¿Se puede viajar un bebé recién nacido en avión?
¿Un bebé recién nacido puede viajar en avión? Los días posteriores a haber dado a luz seguramente te apetezca tomarte un tiempo para descansar, recuperarte y conocer a tu bebé tranquilamente. En caso de que tengas planificado un viaje en las fechas próximas al parto, debes tener en cuenta ciertos aspectos como los siguientes:
¿Qué pasa si mi bebé viaja en avión?
¿Puede afectarle al bebé viajar en avión? Los cambios de presión pueden causarle molestias en los oídos. Esto también le sucede a los adultos, sólo que en los pequeños la trompa de Eustaquio es más estrecha y puede taponarse más fácilmente, provocando incomodidad y dolor.
¿Qué debes tener en cuenta si vas a ir con un bebé en avión por primera vez?
Y si el viaje se va a realizar en avión por primera vez, la preocupación aumenta. Lo cierto es que si vas a ir con un bebé en avión lo que tienes que tener en cuenta es llevar todo bien organizado y planificado para que el viaje sea lo más placentero posible.
¿Cuál es el derecho de los niños a viajar en avión?
Los niños no son ciudadanos de segunda y tiene el mismo derecho a viajar en avión como cualquier adulto. Quien no lo entienda, es su problema. Si estáis planeando vuestras próximas vacaciones y tenéis que viajar en avión, os aconsejo que no dejéis de hacerlo por tener un bebé pequeño.
¿Por qué los bebés no pueden viajar después del nacimiento?
Esto es debido a que después del nacimiento Los bebés pueden expulsar durante algunos días restos de líquido del vientre materno, y es importante que no tengan nada de esto en los oídos en el momento de viajar, entre otras cosas.
¿Cuándo puedo viajar a mi bebé?
Puede hacerlo desde el momento en que nace, aunque lo más prudente sería hacerlo a partir de las dos semanas de vida, o si se trata de un viaje muy largo (de 10-12 horas) mejor esperar hasta que el bebé cumpla el primer mes. ¿Puede afectarle al bebé viajar en avión?
¿Por qué es tan importante viajar con los hijos?
Tan sólo mencionar las palabras avión y bebé en la misma frase puede llegar a generar ansiedad en algunos padres recientes, pero viajar con los hijos es una experiencia maravillosa de la que no hay por qué privarse por haberse convertido en padres.