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¿Cómo empezar una conversacion de divorcio?
Expresa tus sentimientos o insatisfacción con el matrimonio.
- Dile directamente a tu cónyuge que quieres conversar sobre su matrimonio, diciendo algo como «Tenemos que hablar sobre el estado de nuestro matrimonio».
- Expresa tus emociones con honestidad y sin echarle la culpa a tu cónyuge o insultarlo.
¿Cómo empezar a hablar de la separacion con tu pareja?
Consejos para decirle a tu pareja que te quieres separar
- Planea el lugar y el tiempo en el que le darás la noticia. Debes de pensar en el lugar y en el momento más adecuado para hablar con él/ella.
- Mantén una actitud sincera y firme.
- Muestra empatía hacia la otra persona.
- Escucha activa.
- No hagas comentarios con esperanzas.
¿Cómo puedo ayudar a mi cónyuge en el divorcio?
Expresa tus deseos de una forma honesta y directa sin echarle la culpa a nadie y ten cuidado de conversar con tu cónyuge sobre los arreglos prácticos para que así el divorcio pueda ser lo más amistoso posible. Por supuesto, si las cosas se ponen difíciles, puedes pedirle ayuda a un mediador o un abogado para tener esta conversación.
¿Cómo decir a tu cónyuge que quieres divorciarte?
Dile a tu cónyuge, en términos concisos, que la decisión está tomada sin dejar espacio para la incertidumbre (sobre todo si estás absolutamente seguro de que quieres divorciarte). Podrías decirle «Me parece que nuestro matrimonio no está funcionando, así que creo que lo mejor es que nos divorciemos».
¿Qué hacer si no me quiero divorciar?
En caso de que no estés seguro en cuanto a la decisión de divorciarte, podrías pedirle en cambio una separación de prueba, diciendo algo como «Creo que necesito tiempo y espacio para pensar en nuestro matrimonio. No me quiero divorciar, pero creo que por ahora deberíamos separarnos».
¿Cómo proteger a los hijos de un divorcio o separación?
Los padres deben asegurarse de que su divorcio o separación no repercuta negativamente en la calidad de vida de sus hijos menores y, además, les afecte lo menos posible. Para ello deben tener en cuenta sus circunstancias personales y profesionales para que ejerzan la custodia de forma correcta y adecuada.